Trading Simple y Sabio
Hoy te quiero contar sobre un proceso muy interesante que he vivido desde que inicié en el trading. Sobre la ilusión y las expectativas con las que inicié, la cantidad de conocimiento que empecé a acumular y cómo este me afectó a la hora de tomar mejores decisiones de trading y por último, el camino de “desaprender”, entender y simplificar mi operativa para empezar sentir mejoras notables.
Te quiero contar lo que en mi opinión es hacer trading de forma simple y sabia, y trataré de exponer algunas claves para lograrlo.
Así que vamos al tema.
COMPLICANDOME LA VIDA
Cuando me doy cuenta de la existencia de algo nuevo para mí y me gusta, empiezo a buscar mucha información. Busco blogs, artículos, videos en Youtube, referentes en redes sociales y todo lo que pueda.
Busco diferentes posturas sobre el tema.
Cuando hay alguna situación que genere polémica, lo primero que hago es tratar de conocer todas las posturas posibles. Puntos de vista de diferentes ángulos que me ayuden a hacerme una idea general y luego sí plantear mi propio significado.
Esta forma de abordar la vida me ha traído muchos beneficios a lo largo de ella porque de una forma u otra, me ha ayudado a tomar decisiones más ecuánimes. Me ha evitado juzgar por algún sesgo de percepción.
Pero no en el trading.
En un momento de mi proceso empecé a investigar los mejores indicadores, las mejores estrategias, los mejores formadores, los mejores libros.
Que las medias móviles respaldando el precio y con una tendencia clara son la mejor estrategia.
Que el volumen dependiendo de la formación de la vela me va a determinar un giro del mercado.
Que el “Volume Profile” es la panacea en identificación de zonas de oferta y demanda.
Que las Bandas de Bollinger nos definen hasta dónde puede llegar el precio.
Que…
Que…
Y puedo seguir.
Literalmente me llené de toda la información que podía porque siempre he pensado que el conocimiento es poder. Que si estudio mucho y sé todo lo que puedo saber, me va a ir mejor.
Pero no ha sido así. En el trading, como en algunas otras situaciones de la vida, no ha sido así.
Porque entre más sabía, más confirmaciones buscaba para entrar en una operación. Entre más sabía, más rabia me daba cuando tenía un stop. Entre más sabía, más me costaba reconocer en lo que estaba fallando. Entre más sabía, más grande era mi ego frente al mercado.
Pero no existe capital económico ni emocional que aguante tantos stops ni cuentas quebradas; que resista el paso del tiempo y la frustración sea cada vez mayor por no lograr resultados; que soporte la ansiedad generada por las expectativas que tenía al querer vivir del trading.
Así fue como empecé de nuevo tratando de “desaprender” lo que más pudiera. Estudiar primero el mercado desde su forma más pura, el precio. Empecé a entender que entre más sencillo lo haga, mejor la comprensión.
Este ha sido un proceso largo y retador, pero he visto los frutos con los resultados. Precio, volumen y contexto o estructura, es lo único que tengo en cuenta para entrar en una operación. Me dediqué a estudiar solo una estrategia y volverme especialista en ella, y aunque todavía queda mucho camino por recorrer y todavía mucho por “desaprender”, lo cierto es que el objetivo cada vez está más cerca.
Al principio usaba muchos indicadores y tenía que tener en cuenta varios factores para plantearme tomar un trade. Que si el MACD cruzaba la línea con fuerza, si hacía divergencia con el precio, pues mejor; si el precio se encontraba alejado de los extremos del Keltner Channel y la SMA de 20 períodos estaba inclinada hacia mi objetivo. Tenía en cuenta todas las noticias y que si el retroceso era muy fuerte lo debía esperar más profundo, ya no en la SMA 20 sino en la 80. Si la corrida era muy fuerte entonces no iba a esperar un retroceso profundo sino en una SMA de 8.
Esta entrada del Blog se llama Trading Simple y Sabio porque definitivamente considero que es la forma de hacer trading. Lo más simple que se pueda; teniendo unos parámetros claros de contexto, entrada y salida y solo enfocarse en eso. Porque a veces sucede que tenemos tantas variables para entrar a un trade que nos pasamos buscando la entrada perfecta que pocas veces va a salir, esa entrada en la que los planetas se alinean.
Me voy a permitir enumerar a continuación lo que desde mi perspectiva y experiencia es simplificar el trading. Aún me falta camino por recorrer y hacerlo más simple todavía, pero lo que he avanzado es mucho.
- El principal indicador es el precio.
- Si usas volumen, trata de que sea de un solo indicador, porque yo antes por buscar precisión usaba tres maneras diferentes de identificarlo.
- Vuélvete especialista en una estrategia o en un parámetro. Entre más tipos de entradas tenemos, más complicado se vuelve hacer backtesting y volverse experto.
-
Tener un Plan de Trading. Este debe ser tan claro que casi no haya dudas.
- Cuándo entrar. Cuándo salir. - Qué tipo de mercado operar. - Cómo voy a gestionar el trade una vez esté en él. - Cuánto debo arriesgar. - Cuántas operaciones puedo realizar. - Cuál es el riesgo semanal y mensual. - Importantísimo. Backtesting. Probar la estrategia al menos un año previo y ver que tenga una ventaja estadística. Aquí puedes revisar nuestra entrada sobre el tema.
- Vital. Llevar una Bitácora de Trading en la que puedas tener registro de todo y llevar una estadística de tus trades, tus emociones, tus comentarios, tus aciertos y tus errores. Si quieres que este proceso sea automático, te invito a ver el siguiente video.
- Paciencia. Dale tiempo a tu estrategia, y date el tiempo de volverte bueno operándola. Date tiempo de convertirte en un trader profesional.
¿Por qué se vuelve simple?, porque se vuelve algo mecánico. Identificar tu patrón de entrada, cumplir tu plan de trading y tener paciencia para que seas mejor trader.
Para mí, eso es todo.
Y sabio porque definitivamente es un proceso de autoconocimiento, personal y como trader. Empezamos a conocer nuestras emociones antes, durante y después de la operativa; aprendemos de paciencia, disciplina, enfoque y ver más allá del resultado. Debemos aprender a amar el proceso y aprender del mismo, a adquirir hábitos que nos permitan ser cada vez mejores personas y traders.
Sabio porque empezamos a estudiar nuestros números de trading. Analizamos la operativa cada día, cada semana y cada mes. Nos damos cuenta cuál es nuestro mejor estado para operar y nuestro mejor horario.
Para ponerte un ejemplo concreto. Mis dos mejores días para operar son los martes y los jueves. Los días que más pérdidas tengo son los lunes y los viernes.
La hora a la que tengo mis mayores ingresos es entre las 10 y las 11 de la mañana. La hora a la que tengo más cantidad de stops es a las 9 de la mañan, es decir, en la apertura.
El “mood” con el que he tenido más ganancias es cuando entro “agresivo”.
En resumidas palabras, medimos y conocemos nuestros números, nos conocemos más como traders y tomamos decisiones más informadas. Mejores decisiones.
Y así, un día y casi sin darnos cuenta, empezamos a ver resultados. El resultado de ser cada vez un trader más profesional.
Empezamos a crear un sistema de trading que se ajuste más a nuestra forma de ser y operar, apelando a la simplificación
Sebastián Orozco
Head of Partnerships
